Rutas..., cuál escoger, cuándo y cómo...(parte I)

Elegir o seleccionar una ruta cuando uno se inicia en esto del senderismo no es tan fácil..., sobre todo si no se tiene experiencia en caminar por el campo o la montaña, se desconoce la forma de catalogación y señalización de los senderos y además no se dispone de criterio de valoración de la información y condicionantes de cada ruta.

Lo más fácil siempre es pedir consejo y acompañamiento a un experto o guía de senderismo o participar con un club o grupo de senderismo de garantías, eligiendo las rutas que mejor se adapten a tu capacidad física y técnica. En estos casos siempre te encuentras a dos tipos de participantes: aquellos que van, cumpliendo eso si con todas las normas y directivas de la organización, pero que ni estudian el itinerario ni se preocupan de saber prácticamente nada de la ruta. Y por otro lado te encuentras a los que se involucran, se informan y estudian la ruta y sus condicionantes de realización, incluso antes de apuntarse..., no vaya ser que no sea la más idónea para ellos o no se adapten a sus gustos. Para estos últimos es esta publicación, para los que además de andar y de disfrutar del paisaje quieran conocer los intríngulis de los itinerarios, sus señalizaciones, accesos, dificultades, horarios de realización... y en definitiva iniciarse en el conocimiento del estudio del itinerario de una ruta y sus condicionantes de ejecución.

Tipos de rutas y características.

Las principales clasificaciones de los tipos de rutas obedecen a estos aspectos:

1. Por su tipo de trazado.
2. Por su longitud o distancia.
3. Por su grado de dificultad.

Por su tipo de trazado las rutas pueden ser Circulares, de Ida y Vuelta, y Lineales .

Se denominan rutas Circulares aquellas que finalizan en el mismo lugar en que se inician pero que la mayor parte del itinerario o en su totalidad, es único y no se vuelve a pisar. Una ruta de Ida y Vuelta es aquella que también finaliza en el mismo lugar que se inicia pero cuyo recorrido es mayoritariamente el mismo pero realizado a la inversa (en sentido contrario). Estas rutas son las ideales para realizarlas trasladándose uno con su propio vehículo. Las rutas Lineales son aquellas que comienzan en un sitio y acaban en otro, y por tanto requieren de un apoyo de transporte distinto para el inicio y en la finalización de esta.

Las rutas o senderos se clasifican por su longitud o distancia según la homologación establecida para su señalización por la Federación Española de Deportes de Montaña y Escalada (FEDME). Siendo la siguiente:

• Rutas de Sendero Local (SL): Aquella que normalmente no tiene una longitud superior a 10 kms. y que su itinerario transcurre principalmente por el término municipal de una localidad.

 

• Rutas o senderos de Pequeño Recorrido (PR): Aquellos senderos cuyos recorridos tienen una longitud entre 10 y 50 kms.

• Rutas o senderos de Gran Recorrido (GR): Señalizados así aquellos que tienen más de 50 kms. de longitud.

El tercer aspecto de como se clasifican las rutas es por su Grado de Dificultad Técnica.

Normalmente en la mayoría de las referencias a rutas (aplicaciones informáticas como Wikiloc, o buscadores o señalizaciones de senderos y rutas) se simplifica en este aspecto a tres niveles de dificultad: Fácil, Media y Alta.

Estos términos conjugan principalmente la valoración de cuatro características: la severidad del medio natural, la orientación en el itinerario, la dificultad en el desplazamiento y la cantidad de esfuerzo requerido. Para aquellos que se inician en el senderismo, tomar como referencia, como grado de dificultad, que una ruta es Fácil o de dificultad Media o Alta, es más que suficiente ya que en definitiva la cataloga dentro o no de sus posibilidades.

No obstante para aquellos que por interés en profundizar en los datos de ejecución de la ruta o porque sean guías de senderismo necesiten más información, les interesaría saber que a partir del año 2003 se estableció el sistema de información MIDE (Método de Información de Excursiones), que gracias a la recomendación directa de la FEDME en su aplicación, cada vez aparece en más señalizaciones de los tipos de rutas y senderos facilitando en gran medida su estudio para la ejecución.

El MIDE (Método de Información de Excursiones) es un método para valorar y expresar la dificultad de las excursiones a partir de una escala de graduación de las exigencias técnicas y físicas de los recorridos, permitiendo clasificarlos para una mejor información. Toma los cuatro parámetros de dificultad expresados anteriormente como información de valoración y los valora en una escala de 1 a 5 (de menor a mayor dificultad). Y por otro lado también añade otros parámetros como información de referencia, completando con estos una información muy importante para el senderista.

En la actualidad en la mayoría de los paneles informativos y referencias informáticas (o apps) esta información se está estandarizando como necesaria y aconsejable. Para profundizar más en los distintos índices de valoración y parámetros del MIDE les recomiendo informarse en: https://montanasegura.com/el-mide/

Señalización de Senderos.

Unos de los factores o aspectos de más dificultad técnica, dentro de la ejecución de la actividad del senderismo, es la orientación en el itinerario marcado, o sea, no perderse y realizar el trazado de la ruta prevista. Para ayudar a orientarse en el itinerario de la ruta la Federación Española de Deportes de Montaña y Escalada (FEDME), al mismo tiempo que estableció la homologación de los tipos de rutas por su longitud, también determinó los tipos de señalizaciones a marcar en los senderos y rutas según sea de un tipo o de otro. Estos tipos de señales se resumen en los siguientes:

Para más información al respecto puede dirigirse a la web de la FEDME: http://www.fedme.es/index.php?mmod=staticContent&IDf=141 .

Ejemplos de la disposición de estas señales en distintas partes del itinerario...

Señalización de sendero PR en una estaca, sistema que se está estandarizando para rutas muy transitadas.

En este caso la señal es de una ruta SL, y marca el desvío a un punto de visita dentro del trazado.

Esta es una señalización de SL en estaca y con otra complementaria de aviso de máxima altura por itinerario en túnel.

Aquí la señalización corresponde a un sendero PR, y su marcación ha sido en pintura sobre la propia roca o pared.

Para finalizar un ejemplo de señalización en un sendero SL , marcando la aspa de dirección equivocada y con barandillas de troncos y marcación complementaria de peligro.

Es importante tener en cuenta que toda esta señalización es de referencia y está sujeta a las inclemencias del clima y a los avatares de los transeúntes, por lo tanto además de que.. el respeto y el cuidado de estas señalizaciones es imprescindible para que puedan seguir dando su servicio, debemos asumir que la existencia de estas señales no exime de la responsabilidad de prepararse la orientación del itinerario por parte del senderista.

Bien... hasta aquí la primera parte de este tema, en la segunda tocaremos más profundamente la selección, planificación y ejecución de las rutas... Espero que con lo que vas aprendiendo empieces a ver los senderos con una percepción de mayor control y seguridad...

¿Que me llevo a las rutas?

Para los iniciados en el senderismo una de sus primeras dudas es que me pongo para hacer la ruta y que echo en la mochila...

En principio al respecto del equipo que vamos a llevar encima para caminar vamos a decir solo lo esencial, ya que en siguientes entregas profundizaremos en cada uno de ellos... Así que, sin más preámbulos, empecemos por los pies por ser en este deporte los órganos más importantes, y por lo tanto los que tenemos que cuidar mejor... El tipo y las características del calzado a elegir dependerán de varios factores, a saber:

• Tipo de terreno que vamos a pisar en la ruta: pista forestal, asfalto, cauce de arroyos, sendero limpio o sendero quebrado, etc...
• Climatología, la temperatura es también fundamental, ya que no es lo mismo andar a 30 grados a la sombra que a 2 grados o inferior...
• Condiciones en que se encuentra el terreno por la acción de las inclemencias del tiempo: nevado, embarrado por la lluvia, reseco y polvoriento....

A modo general , el calzado debe de ser al menos: cómodo, adaptable (flexible), resistente y transpirable. Partiendo de estas características, y en el caso de tener que llevar los tobillos y los pies bien protegidos por ir por senderos angostos o por las inclemencias del tiempo, se escogerán unas buenas botas a poder ser con membranas impermeables y transpirables. Y en caso de ir por ejemplo en verano por un terreno fácil y sin peligro para los pies ni los tobillos, entonces es preferible las zapatillas de trail o trekking. Actualmente en el mercado existen una variedad ingente tanto de botas como de zapatillas... y por ello dejaremos para otro momento el hablar más detalladamente sobre ello.

 

En relación a la ropa que debemos llevar pasa una cosa parecida, depende de las condiciones climatológicas nos pondremos una sola capa o hasta cuatro en condiciones más adversas , en las cuales es importante también llevar protegidas las manos, la cabeza y el cuello. Sin olvidarnos especialmente de la transpiración y la temperatura de los pies, o por ejemplo en verano protegernos la cabeza con un sombrero o gorra y gafas para el sol. Este tema también será tratado en otro artículo de forma especial.

Y en la mochila ... ¿que pongo?.

En otro momento hablaremos de las peculiaridades de las grandes rutas pero por ahora centrémonos en iniciarnos y perfeccionarnos en las rutas de una sola jornada.

Para las rutas de un solo día nos basta con una mochila de 10 a 30 litros (es por su capacidad de volumen por como se clasifican las mochilas). Esto no significa que vayamos a portar o cargar con tal cantidad proporcional de peso... De hecho la primera norma a tener en cuenta a la hora de ver que se pone en la mochila es …. sólo pondré lo necesario e imprescindible, y a poder ser del menor peso posible. En general yo recomiendo una de tamaño de 22 litros o en su defecto de 30, porque igual sirve por su capacidad y su estructura para rutas de verano con poca ropa de abrigo, como para rutas de invierno. Indispensable, como con todo, que sea cómoda y resistente, además con respaldo y tirantes acolchados transpirables, y bolsillo y/o sujeciones exteriores, y al menos un bolsillo interior. Si además es impermeable o lleva funda impermeable...mejor que mejor.

Bien, después de presentar de forma sucinta el contenedor , hablemos del contenido. Para ello no quiero extenderme, en cumplimiento con la norma de solo equipo esencial e imprescindible, por lo tanto empecemos con lo más importante...

 

Para nuestra hidratación: Agua.

Existen en el mercado multitud de cantimploras o botellas para el agua, ya depende de lo que te quieras gastar tendrás una de mejor material e incluso con acoples en la propia mochila. Sabido es lo fundamental que es ir siempre bien hidratado, o sea sin sensación de sed, por lo tanto lo primero que tienes que ver es el tamaño, según tu necesidad habitual de agua, ...no todos bebemos lo mismo.

Los alimentos nos mantienen con energía...

En el estudio o preparación de la ruta debemos dar bastante importancia a garantizar nuestra suficiencia física y el mantenimiento de la energía. Así que a partir de nuestro autoconocimiento en el gasto energético y de la dificultad del itinerario, calcularemos el tipo y la cantidad de alimentos a llevar así como cuando, donde y como hacer la ingesta. Hoy en día existen bastantes productos comerciales que integran los aportes energéticos necesarios, con mayor o menor facilidad digestiva (barritas, geles o líquidos), y que por su peso y tamaño facilitan su transporte. Aunque yo personalmente siempre que puedo soy más partidario de los tradicionales bocadillos, frutos secos y piezas de fruta, y las "nuevas tecnologías" las llevo, pero para casos de emergencias. Ojo con las sobras de comida y mondas de frutas, estas hay que recogerlas en una bolsa y depositarlas a la vuelta a casa en su correspondiente contenedor. Es lamentable, con la excusa de que son naturales, ver bastantes zonas de rutas llenas de mondas..., ni es cuidar del medio ambiente ni es estéticamente justificable.

Hablando de emergencias...

Nunca pensamos en que nos pueda ocurrir algo en una caminata, pero es especialmente importante prevenir cualquier mínima incidencia, para ello llevaremos el siguiente equipo:

Botiquín Individual: Con un kit de elementos mínimos de primeros auxilios, a los que abría que añadir los elementos que cada cual, conociéndose, le haría falta...; me explico: cada persona tiene sus debilidades, como cefaleas, alergias, conjuntivitis, rozaduras, mal de altura,... entonces para estos casos es conveniente añadir lo apropiado en este botiquín, que más que individual, debería llamarse personal... No olvidarse añadir protectores solares para la piel y los labios, así como algún tipo de goma para contener hemorragias si no lo lleva el kit.

 

Y en este punto debo de hacer un inciso: De nada nos sirve llevar este "kit" si después no sabemos usarlo y aplicar o curar las heridas de urgencia... Así que por nuestro bien y por el de las posibles personas que pudiéramos atender deberíamos aprender unas nociones mínimas de socorrismo.

 

Manta térmica o de supervivencia.

Es una lámina de un compuesto de aluminio con resina y otros componentes del tamaño de una manta individual que al cubrirnos con ella sirve principalmente para mantener nuestra temperatura corporal y en caso de emergencia protegernos de una insolación o del excesivo frío. Además por los colores que lleva nos señalizaría en el campo para un posible rescate.

Silbato.

Normalmente se lleva encima, no en la mochila, y es de gran ayuda para avisar de nuestra presencia en caso de emergencia o por ejemplo a cazadores furtivos que se les oye disparar...

Linterna o frontal lumínico.

Aunque en la actualidad en todos los teléfonos móviles hay led de iluminación, siempre es recomendable llevar una linterna, si además lleva sujeción para la cabeza mejor, que nos servirá para en caso de emergencia iluminarnos el camino o para señalizar nuestra presencia.

Chaleco reflectante.

Con las mismas funciones de señalización que la linterna, es un complemento muy útil para hacernos ver si no llevamos ropa con elementos reflectantes. Por su peso insignificante y su poco volumen vale la pena llevarlo en comparación con el beneficio que podría aportar.

Ropa complementaria.

Dependiendo de la duración y/o condiciones de la ruta debemos sopesar incorporar en la mochila las siguientes prendas: calcetines de repuesto, primeras capas (camiseta interior) para los casos de excesiva sudoración, y un cortaviento o impermeable (muchos senderistas prefieren un poncho porque ocupa poco sitio y además al ponérselos cubre también la mochila.

El otro equipo...

Aunque solo sea una ruta de una jornada, alguna vez podemos necesitar hacer alguna deposición, por lo tanto es muy conveniente llevar papel higiénico o toallitas húmedas, en proporción de las posibilidades de la necesidad que se vaya a tener. Como en el caso de las mondas de frutas..., es lamentable ir por el campo y ver las muestras de papel higiénico como prueba del paso del hombre por esa ruta.... Por lo tanto lo mejor es llevar una bolsa de plástico y el papel usado para limpieza depositarlo en su interior y una vez cerrado convenientemente llevárselo hasta depositarlo en el primer contenedor.

Como cuando vamos de viaje, también es necesario llevar nuestra documentación personal y a ser posible con el dato, en un lugar predominante, de nuestro grupo sanguíneo y las alergias que tengamos.

Antes hablamos que la mochila debería tener bolsillos, pues el motivo es para llevar localizado ciertas cosas como: dinero, las llaves (de la casa y/o del vehículo), una navaja multiusos, un pequeño cordel de 4 mm. de grosor y unos 3 o 4 mts. para cualquier eventualidad. Y como no..., nuestro teléfono móvil (normalmente lo llevaremos encima , por aquello de ir haciendo fotos...). Importante es que lo llevemos cargado a tope y con los datos de contactos de emergencia puestos.

Para el final he dejado un elemento que en la actualidad es muy común entre la mayoría de los senderistas: los bastones de trekking.

Por su facilidad de manejo, poco peso y la gran ayuda que ofrece para distribuir el esfuerzo, el peso corporal y la seguridad de la marcha entre más órganos del cuerpo y no sólo en las piernas..., este equipo es muy recomendable, y además ahora en el mercado es relativamente asequible. 

La sensación que te puede dar después de leer todo esto es que necesitarás un saco y mucho esfuerzo para llevar tanta cosa..., pero no es así. Realmente no es tanto, y el cálculo aproximado de la suma de pesos medios de estos elementos quedaría así:

•   Peso total de todo lo puesto encima: …............... 4 kgrs.

•   Peso total de mochila con el resto de equipo: ….. 5'900 kgrs.

La experiencia nos dice que con este equipo irás seguro y además llevarás todo lo necesario...

Al principio, como irás acompañado en las rutas con gente veterana, no será imprescindible que lleve todo el equipo "complementario", aunque poco a poco te darás cuenta que cada elemento que se ha expuesto aquí es, en algún momento  de las distintas rutas que hagas, mínimamente necesario, y con el tiempo irás adquiriendolo para completar tu equipo. La buena noticia es que en la actualidad, gracias a haberse hecho muy popular la actividad deportiva y sobretodo el senderismo, los costes de estos equipos y la variedad en ellos hacen posible su compra de forma asequible. 

¡¡ Bien..., con estos conocimientos mínimos que vas adquiriendo, ya puedes poco a poco animarte a conocer la naturaleza de cerca , sintiéndote más preparado y seguro en tus primeras caminatas..., y verás como esta actividad te apasiona !!.